Por que todos hemos golpeado una baldosa, un azulejo, una pared... y si sonaba a hueco siempre pensábamos si habría algo dentro, detrás.. sobre todo cuando éramos niños. En la vida hay muchos momentos que suenan a hueco y no tenemos la suficiente ilusión de mirar más allá, de imaginar como cuando éramos pequeños. No deberíamos quedarnos en la primera línea sino mirar mucho más dentro, buscar, indagar... no conformarnos con lo que se nos muestra ante los ojos, pues puede que esté hueco...
"Ojalá" de Silvio, la primera vez que la escuché sentí un grito a mi amor no corespondido y esperanza para seguir adelante en la vida sin tener que depender de ese primer amor, por que la vida sigue sin esa persona y aunque nos gustaria a veces borrar ese amor para no sufrir más, sabemos que nos es posible ya que siempre formará parte de nuestra vida y si realmente a sido ese amor que te ha penetrado en cada poro de tu piel, estará siempre en nuestras visiones, en nuestros pensamientos, en nuestro corazón y como no en nuestra canción.
Las cosas tanto buenas como malas forman parte de nuestra vida. Lo bueno está en adquirir la virtud y la habilidad de recordar sin sufrir, mirar atrás y saber que has aprendido de esa experiencia. De todo lo malo se aprende, y eso es bueno, por lo que podríamos decir que las cosas malas no siempre son tan malas si nos hacen ver cosas que antes no éramos capaces de ver. Esta canción la escuché por primera vez del cd de una gran persona que es compañero mio del trabajo y me gustó muchísimo la forma tan sutíl a la vez que contundente de separar de su vida el recuerdo y la presencia de algo que ya no le aporta nada.
hola!! queria comentar la entrada de más campo y menos PSP, pero no se podía...queria decirte que tienes tanta razón...la ciudad nos hace endurecer demasiado el corazón, hasta el punto de sentirnos amos del universo...pero nada podrá sustituir jamás la sensación de pertenecer a algo mucho más importante que nosotros mismos: la naturaleza.
3 comentarios:
"Ojalá" de Silvio, la primera vez que la escuché sentí un grito a mi amor no corespondido y esperanza para seguir adelante en la vida sin tener que depender de ese primer amor, por que la vida sigue sin esa persona y aunque nos gustaria a veces borrar ese amor para no sufrir más, sabemos que nos es posible ya que siempre formará parte de nuestra vida y si realmente a sido ese amor que te ha penetrado en cada poro de tu piel, estará siempre en nuestras visiones, en nuestros pensamientos, en nuestro corazón y como no en nuestra canción.
Las cosas tanto buenas como malas forman parte de nuestra vida. Lo bueno está en adquirir la virtud y la habilidad de recordar sin sufrir, mirar atrás y saber que has aprendido de esa experiencia. De todo lo malo se aprende, y eso es bueno, por lo que podríamos decir que las cosas malas no siempre son tan malas si nos hacen ver cosas que antes no éramos capaces de ver. Esta canción la escuché por primera vez del cd de una gran persona que es compañero mio del trabajo y me gustó muchísimo la forma tan sutíl a la vez que contundente de separar de su vida el recuerdo y la presencia de algo que ya no le aporta nada.
hola!! queria comentar la entrada de más campo y menos PSP, pero no se podía...queria decirte que tienes tanta razón...la ciudad nos hace endurecer demasiado el corazón, hasta el punto de sentirnos amos del universo...pero nada podrá sustituir jamás la sensación de pertenecer a algo mucho más importante que nosotros mismos: la naturaleza.
Más campo, más amor, más respeto.
Un beso enorme.
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